Los detectives Amaro y Rollins dejan una fiesta y se tropiezan con la Oficial McKenna en la búsqueda de un narcotraficante sospechoso. Un enfrentamiento a disparos termina con el sospechoso gravemente herido. Mientras Amaro lucha por reconciliar sus acciones con su conciencia, la Unidad de Víctimas Especiales lucha por mantener a Asuntos Internos al margen antes de sacar conclusiones. El caso se convierte en un espectáculo público y Amaro debe decidir si luchar por su placa es la mejor decisión para su familia. Mientras tanto, el capitán Cragen hace un sorpresivo anuncio.