Nefes fue obligada a casarse muy joven con un empresario, quien la mantuvo cautiva en una mansión. Nefes y su hijo fueron víctimas de violencia durante años, y ella creó un mundo imaginario para alejarlo de esa cruel realidad y convencerlo de que solo era un juego. En la mansión, su destino se cruza con el de Thair, el hombre que se convertirá en su única oportunidad para escapar de esa pesadilla. Sin embargo, juntos descubrirán que la libertad no es el final del camino y que todavía los espera una dura batalla por delante.